El Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires, recibió un distinguido premio, del Diario La Nación y del Banco Galicia, a la excelencia agropecuaria, por un trabajo molecular que se hizo sobre poblaciones de abejas, el cual demostró la no existencia de africanización en ellas, y permitió obtener un estudio científico por el que se respalda a productores bonaerenses que exportan material vivo a otros países.
Al mismo tiempo se comprobó, que Argentina y dentro de nuestro país la Provincia de Buenos Aires, tiene el reservorio de apismellíferas ligústicas más grande del hemisferio sur, la abeja italiana, y su importancia radica en que es la abeja doméstica en la que se basa la producción mundial de miel. Sirve además para certificar científicamente las exportaciones a Europa y países de Asia y también brinda la posibilidad de poder entrar con nuestro material vivo a otros países, como Canadá y Estados Unidos, quienes hoy le están comprando a Australia y a Nueva Zelanda. El estudio, fue realizado por el Ing. Agr. Osvaldo Atela, de la Cabaña Apiario, Pedro J. Bover, del Ministerio de Asuntos Agrarios (M.A.A.) de la Provincia de Buenos Aires y el Dr. Alberto Abrahamovich CONICET – Universidad Nacional de la Plata Facultad de Ciencias Sociales y Museo. El trabajo también fue presentado en Bulgaria por empresarios argentinos, en el Primer Congreso Mundial de Criadores de Reinas, con una gran resonancia. El proyecto fue financiado por el Consejo Federal de Inversiones y el M.A.A. La invitación a participar de este premio fue a través de la empresa Parodi Apicultura, firma con la que la Cabaña Bover, realiza las exportaciones.
“ES PARA OPTIMIZAR Y MEJORAR LA PRODUCCIÓN APÍCOLA”
Al ser consultado por dicho logro el Ing. Osvaldo Atela manifestó su gran satisfacción y señaló que “nos reconforta y alienta a seguir avanzando en el camino trazado y sentimos que nuestro esfuerzo contribuirá a optimizar y mejorar la producción apícola en nuestro país, y a sostener el crecimiento de las exportaciones de nuestros productos, en especial el material vivo que llega a varios países del mundo”. “El M.A.A –explicó- implementa todas las acciones necesarias para apuntalar en su crecimiento al productor apícola tanto sanitarias como económicas y desde la Cabaña Apiario, brinda el material genético para obtener líneas resistentes a las enfermedades, mansedumbre, baja enjambrasón, entre otras acciones”.Paralelamente consideró que “el tema sanitario, es la otra pata del éxito de los apicultores, quienes deben mantener sus colmenares sanos” a la vez añadió “para ello el Ministerio de Asuntos Agrarios, tiene un programa sanitario que lo está llevando a cabo de acuerdo a los centros apícolas que lo aceptan, desde el departamento de Apicultura y Granja, ubicado en 13 y 32 en la ciudad de La Plata”. “ Allí, les prestan todos los servicios para ayudar a los apicultores en los análisis de enfermedades que les permite saber con qué tasas de infestación se está manejando”. El trabajo, “es inédito-continuó Atela- es el primer estudio molecular que se hace sobre poblaciones de abejas, en este caso Provincia de Buenos Aires. El objetivo era saber si había avanzado la africanización desde el norte del país. Señaló que “los trabajos fueron totales en cuanto a sus resultados, no demostraron africanización y esto permite poder tener un estudio científico que nos diga fehacientemente, y respaldar a productores que exportan material vivo a otros países o a otros continentes y decir qué tipos de abejas tenemos”. Expresó que “si no pudiéramos decir que genéticamente o molecularmente tenemos este tipo de abeja no nos dejarían entrar, está favoreciendo principalmente en lo económico a cumplir ese objetivo, respaldar las exportaciones y después en la selección, para poder determinar qué tipos de abejas seguiremos seleccionando, como aquellas que no demuestren africanización o comportamiento diferente”. En tercer lugar, dicho trabajo favorece a la fase tecnológica, cuando determinamos madres o líneas con resistencias a enfermedades para saber molecularmente a qué genomas pertenecen y de esa manera poder multiplicar con base ciertas, antes multiplicábamos cualquier abeja por su fenotipo, por lo que nos demostraban ellas, ahora demostramos el genotipo y tenemos bases ciertas de qué podemos multiplicar”. Precisó “estuve 5 años luchando, pero nuestro trabajo fue finalmente presentado por empresarios argentinos, en el Primer Congreso Mundial de Criadores de Reinas que se realizó en Sofìa, capital de Bulgaria, con una resonancia espectacular, porque se demostró que Argentina y dentro de nuestro país la Provincia de Buenos Aires, tiene el reservorio de apismellíferas ligústicas más grande del hemisferio sur, que es la abeja italiana y su importancia radica que es la abeja doméstica más manejable del mundo en la que se basa toda la producción mundial de miel, de paquetes, de núcleos, de celdas reales, se hace sobre esa abeja”.
Para ampliar información consultar al siguiente e-mail:apibover@hotmail.com
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